
Esa es la pregunta que ahora la atormentaba, que estás sintiendo realmente? Estaba tan cansada de todo lo que la rodeaba, de las añoranzas que la acompañan en esos recuerdos donde más fue feliz. Era fantástica, alegre, feliz y su alma estaba llena de vida, pero sentía la sensación de hace un tiempo que todo eso había muerto. Su alma, su vida estaba apagada y encadenada a continuar así si no conseguía respuestas. Sólo le quedaba una oportunidad más para descubrir lo que siente.
Desahogando sus penas y frustraciones mientras hace sonar las teclas rápida y ruidosamente de su computadora, buscando la forma de expresarse porque el silencio es lo único que ahora puede encontrar, ya no quiere hablar, no sé si esa era un clase de depresión, pero odiaba cada segundo el verla así.
Estaba atormentada por el huracán que lleva internamente, todos los días, sentía esa furia interna que la quemaba, sí, antes la apasionaba, no importaba lanzarse por un precipicio porque siempre existía un plan b, c y hasta d, ahora todo había cambiado, solo se había quedado estancada en el plan a, un plan que la hacía sentir miserable, debía romper con eso, necesitaba ayuda, estaba ahogándose y nadie podía oírla.
Su alma ya no era la misma y como dolía, era depresión pura, se sentía sola y aunque le encantara la soledad se sentía asqueada de esta sensación. Quizás se avecina una tormenta para ella y no está preparada para nada.
Tenías que verla, era un hueco profundo, estaba tocando fondo. Pobre de ella.
Sólo puedo desear que nuevamente encuentre su camino, porque el que está recorriendo ahora, no es el indicado.